La arquera, oriunda de Alcira Gigena, que actualmente juega en España dejó un mensaje alentador y además recordó su paso por Talleres. Conocé cuales son sus referentes.
Natasha Mondino es de Alcira Gigena y desde los tres años juega al fútbol. Comenzó en la esquina de su casa, jugando con familiares y amigos. Hoy, ataja en España.
Su carrera comenzó en Roncedo, luego pasó a Talleres de Córdoba, defendió el arco de Estudiantes y hasta integró la selección de Río Cuarto. Luego, pasó al Deportivo Monte, equipo de Santander (España) que milita en la segunda división.
A la hora de recordar su formación y los técnicos que más la marcaron, Mondino hace hincapié en su paso por Talleres.
«En talleres, todos dejaron algo en mi. Estuve dos años teniendo el mismo DT y entonces es como que recién empezábamos y el nos enseñaba todo lo nuevo, cosas que nunca habíamos visto», comentó.
«Después tuve a Andrés Navarro y es un crack, muy bueno, enseñaba muy bien, muy profesional», destacó la arquera.
En un momento en Talleres, cuando llegó un nuevo entrenador, quien trajo a parte de las integrantes del plantel de su anterior club le tocó ser suplente. Ocupar un lugar en el banco de suplentes le duró muy poco tiempo, ya que al cabo de tres partidos recuperó su lugar en el equipo titular y fue la artífice del campeonato, atajando penales en la final ante Belgrano.
«En Talleres lo que más me quedó marcado es que cada vez que terminaba de entrenar tenía que tomarme la Lep siempre al mismo horario y Luis Galván (campeón del mundo en Argentina 1978) me esperaba, llevaba hasta la terminal para que vuelva a mi casa», recuerda la arquera.
«Estoy muy agradecida, porque que me lleve un campeón mundial a la terminal y que sea mi referente y el coordinar de fútbol femenino, nos acompañe y nos aconseje, la verdad que eso no tiene comparación con nada. En Talleres es lo mejor que viví», agregó la joven oriunda de Alcira Gigena.
Luego, se fue a estudiar a Río Cuarto y allí entrenó con José Mancinelli.
«Me fui sacando los miedos entrenando con varones. En Río Cuarto entrené con José Mancinelli. Con José entrenaba con mujeres y varones. Estoy muy agradecida a ellos», mencionó Mondino.
En relación a su presente en España, la arquera le agradeció al club por la oportunidad y a su representante por la gestión realizara para que pueda emigrar al viejo continente.
«No me van a dar las gracias ni las pelotas que tape para agradecerle a todo lo que el club hizo por mi, en darme la oportunidad de venir, jugar y enseñarme. Hace siete meses que estoy y todo lo que aprendí jamas en mi vida me imaginé aprenderlas», dijo.
A lo que agregó: «También quiero agradecerle a mi representante que fue el me habló para venir acá, al club este y no la desaproveché. A penas me dijeron me tomé el avión y me vine».
La lucha y enseñanza
«Creo que por mi experiencia de vida, y todas las que pasé, creo que como todo deportes y sobre todo el fútbol tenemos que pasar más malas que buenas, las malas nos ayudan a crecer y poder cumplir nuestros sueños. Yo a esto jamás lo soñé, lo que si soñé es jugar en la Selección Argentina», reflexionó Mondino.
Luego, dejó un mensaje alentador para todas las que sueñan con tener una carrera en el fútbol.
«Le digo a todas las chicas que nunca dejen de soñar, que nunca dejen de entrenar que el éxito llega a base de eso. Que nunca bajen los brazo a pesar de todas las malas que se nos puedan cruzar en el camino», resaltó Natasha Mondino.
Los referentes bajo los tres palos
En relación a quienes son sus referentes o los arqueros en los que se fija, Mondino no dudó en destacar a Nahuel Guzmán e Iker Casillas en el plano masculino y Hoppe en el femenino.
